El dopaje de los bichos mutantes


Han sido confirmadas las versiones más pesimistas en las que se preveía que los enmascaradores de productos dopantes eran vertidos a la sima abisal junto con la basura nuclear. Se está demostrando que los controles fallan y que la siniestra Corporación Anémona campa a sus anchas, vertiendo toda clase de productos a la fosa. Ello origina que los bichos mutantes cada vez  sean más numerosos y más grandes. Si se quiere acabar con esta situación las autoridades deberán descubrir donde se haya la plataforma de  los vertidos tóxicos.